7 razones para pasar una luna de miel en Marruecos
El viaje de luna de miel es uno de los más esperados y recordados en la vida de una persona. Aunque hay tantos destinos como gustos tienen las diferentes parejas, en lo que siempre se está de acuerdo es que el lugar elegido tiene que ser único, capaz de satisfacer todas nuestras expectativas y conseguir que siempre que pensemos en nuestra luna de miel la consideremos “el viaje de nuestra vida”.
Marruecos es un destino cada vez más elegido por las parejas y son muchas las razones que invitan a ello. Estas son las siete principales, aunque seguro que si se les pregunta a los novios que ya se han decantado por este viaje podrían citar muchas más:
Un destino exótico
Marruecos tiene ese punto de exotismo que a menudo se busca en un viaje de luna de miel. Con escenarios, rincones y hoteles como recién salidos de un cuento de las Mil y Una Noches, este país es lo suficientemente diferente a nuestra cultura y a los paisajes a los que estamos acostumbrados para vivir cada día una aventura diferente.
Presupuesto personalizado
Cualquier viaje a Marruecos puede adaptarse al presupuesto que tenga una pareja. Dependiendo de los días en el destino, el alojamiento y el tipo de recorrido que deseemos realizar se puede configurar un viaje acorde a cada bolsillo. Puedes ajustar la estancia al tiempo que tengas disponible y siempre podrás ver sitios interesantes, incluso con rutas circulares para que no pierdas tiempo. También tendrás la oportunidad de escoger desde alojamientos más modestos a los hoteles más lujosos del mundo. Y en tu mano está optar por un viaje por tu cuenta, un recorrido organizado o incluso una ruta con guía privado. ¡Existen mil opciones para lograr un viaje acorde a tus gustos e intereses!
Perfecto en cualquier estación
Marruecos se puede visitar en cualquier estación y en todas ellas tiene encanto. Aunque probablemente las mejores épocas para viajar a este país son la primavera y el otoño, meses en los que las temperaturas son más agradables, el verano permite baños en deliciosas playas y el invierno contemplar paisajes como el Atlas nevado, donde también se puede esquiar o practicar deportes de invierno.
Un destino cercano y accesible
La costa marroquí está situada a tan solo 14 kilómetros de España, lo que posibilita que puedas acceder al país por carretera, barco o avión. El creciente interés por viajar a Marruecos hace que hayan aumentado el número de compañías aéreas que vuelan a este destino, así como los aeropuertos españoles que conectan con diferentes puntos marroquíes. Esto ofrece a los novios la posibilidad de aprovechar mejor su luna de miel.
Los mejores y más variados hoteles
Marruecos tiene hoteles perfectos para vivir una luna de miel de ensueño. Existen posibilidades para todos los gustos, desde La Mamounia en Marrakech, que ofrece la experiencia de alojarse en un auténtico palacio, a los encantadores riads que se pueden encontrar en cualquiera de las ciudades marroquíes, pasando por la posibilidad de alojarse en una kasbah o en una jaima en medio de un mar de dunas en el desierto.
La luna de miel más completa
El propio eclecticismo y la diversidad de paisajes de Marruecos ofrece la posibilidad de vivir una luna de miel acorde a las expectativas de cada pareja. Puedes planificar una ruta gastronómica, deportes de aventura o días de compra en los zocos. Tienes medinas llenas de historia, ruinas romanas, preciosas cascadas, ciudades imperiales con museos y mezquitas, y paisajes de ensueño para que puedas conformar la estancia en una ciudad o un recorrido acorde a tus intereses.
Una cálida acogida
A todo ello hay que sumarle el plus que supone encontrar un país seguro y acogedor con el turista, y deseoso de mostrarse al mundo como un destino perfecto para pasar unas vacaciones inolvidables. Ir a Marruecos es tener aseguradas sonrisas y saludos por doquier. La diversidad de Marruecos, su exotismo y su cercanía convierten al país en un destino único, cada vez más elegido por parejas que quieren pasar una luna de miel auténtica, diferente y muy especial. Un país exuberante y amable que no solo ofrece aquello que vas buscando, sino que supera con creces todas las expectativas.