Qué ver en Rabat
Actualizado el 09/05/2016
La entrada de hoy la dedicaré a Rabat, la capital del reino de Marruecos y cuarta ciudad imperial. Es una ciudad que sabe combinar a la perfección su parte moderna con su centro histórico. A pesar de ser la capital del país no es uno de los principales destinos turísticos, pero hay que decir que merece una visita si vas a Marruecos. Os presento los lugares inevitables que ver en Rabat:
Torre Hassan
La mezquita de Hassan, mandada construir por el sultán Yacub Al-Mansur en el siglo XII, fue pensada para ser uno de los más grandes templos del mundo musulmán. Su construcción fue abandonada tras la muerte del sultán quedando sólo realizada una torre de 44 metros, de los aproximadamente 86 previstos, algunos muros y unas doscientas columnas. Posteriormente, el terremoto de Lisboa de 1755 dañó gran parte de lo que había en pie.
La torre Hassan es, sin duda, el monumento más emblemático de la ciudad y monumento imprescindible que visitar en Rabat. Tiene un gran parecido con la Koutoubia de Marrakech y la Giralda de Sevilla, y no es casualidad, ya que son del mismo arquitecto. Este minarete, de planta cuadrangular, es de color rojizo con bonitos relieves en piedra y en su interior, en lugar de escaleras, hay rampas.
El conjunto forma hoy un interesante paisaje con la torre de fondo y coronado por el Mausoleo de Mohamed V, abuelo del actual rey.
La Kasbah de los Oudayas
La Kasbah de los Oudayas es una ciudad amurallada, dentro de la ciudad de Rabat, construida por los almohades en el siglo XII al borde del mar. La gran puerta de acceso “Bab Oudaya”, considerada como una de las joyas del arte almohade, nos adentra en un entramado de cuidadas callejuelas llenas de flores y casas encaladas de blanco y azul con sus decoradas y trabajadas puertas.
Es un lugar muy pintoresco que respira paz y tranquilidad, siendo ideal para pasear, recorrer la calle Jamaa o tomar un te moruno y algún dulce de almendras en el agradable café “Maure”, con bonitas vistas a la desembocadura del río Bu Regreg y a la ciudad de Salé.
En el interior de la Kasbah se encuentran la Mezquita Jamaa-Al-Atiq, la más antigua de Rabat, el Palacio de Moulay Ismail, que aloja hoy en día el Museo Nacional de la Joyería, el precioso Jardín de los Andalusíes, creado a principios del siglo XX al estilo arábigo-andaluz, y el espectacular mirador hacia el océano conocido como Plataforma del semáforo, una amplia explanada en la parte más alta de la kasbah y desde donde se tienen estupendas vistas de la ciudad.
El Museo Nacional de la Joyería, pequeño pero atractivo, fue concebido bajo su actual aspecto por el Ministerio de Cultura de Marruecos en colaboración con la Junta de Andalucía. Este magnífico edificio islámico se estructura entorno a un patio central con tres plantas, destacando la torre que lo flanquea en su lado sur. El objetivo de este museo es dar a conocer la artesanía y orfebrería marroquí, desde la Prehistoria hasta el siglo XIX.
Alrededor de este museo se encuentra uno de los espacios naturales más hermosos de Rabat, los famosos Jardines Andalusíes. A pesar de que fue construido siguiendo las reglas de las tradiciones andaluzas, fue diseñado por un francés en el siglo XX.
La Kasbah de los Oudayas es un lugar que aconsejo como visita obligada, ya que es una de las zonas más bonitas de la ciudad.
La Medina, otro lugar que ver en Rabat
La medina de Rabat fue fundada como tal por los Andalusíes en el siglo XVII, tras la expulsión de España por Felipe III, que construyeron la muralla perimetral que cerraba y protegía la medina a partir de las murallas almohades.
Tiene un trazado bastante rectilíneo, muy diferente de los habituales laberintos de callejuelas. Se puede recorrer tranquilamente, sin la gran cantidad de gente que tienen otras medinas de las grandes ciudades marroquíes.
La puerta Bab Rouah es la más grande y bonita de las puertas almohades, está abierta al público, su visita es gratuita y en su interior alberga exposiciones, normalmente de fotografía o pintura.
La puerta Bab El Had es la más animada de todas y es la única puerta almohade utilizada en la actualidad como paso peatonal. Si nos adentramos por ella llegamos a la calle Souika, la más grande y concurrida de la medina, donde se encuentra la Gran Mezquita y que acaba en el zoco Es Sebat, el barrio de los marroquineros, los vendedores de tejidos y bazares.
Después viene la calle de los Cónsules, parcialmente cubierta de vidrieras y bordeada por puestos de artesanos, vendedores de tejidos y alfombras. Esta calle está envuelta de una historia y leyenda que nos hace descubrir una faceta original de Rabat. Allá por el siglo XVII, la principal actividad del puerto era la piratería y los barcos que allí atracaban vendían a sus esclavos en el “mercado de esclavos”, incluidos los cristianos. Los diplomáticos y representantes extranjeros residían en esta calle para tener así fácil acceso a dicho mercado, donde podían comprar a sus compatriotas capturados por los piratas.
Necrópolis de Chellah
Un poco más alejado del centro, a unos dos kilómetros, merece la pena visitar la necrópolis meriní de Chellah, construida en el siglo XIV sobre las ruinas de la antigua ciudad romana de Sala. Por allí pasaron, fenicios, cartagineses, romanos y musulmanes, lo que hace que presente una importante riqueza cultural.
Chellah está rodeada por un recinto amurallado al que se accede por una monumental puerta flanqueada por dos torres octogonales almenadas y que da paso a un oasis de tranquilidad, un jardín agradable y florido, en el que se aprecian las ruinas romanas y las meriníes. De la ciudad romana quedan restos como las termas, el barrio artesanal y un arco del triunfo; de la necrópolis una sala de abluciones, una zawiya (edificio religioso musulmán) con un oratorio, un minarete decorado con azulejos de colores y varias salas funerarias.
El lugar es una importante colonia de cigüeñas que se han instalado en el recinto, siendo éste sobrevolado por decenas de ellas.
Y con la necrópolis de Chella terminamos de recorrer los principales lugares que ver en Rabat. ¡Nos vemos en la siguiente entrada! ¡No os olvidéis de comentar si queréis añadir algo!
Si quieres saber más sobre la ciudad, visita nuestra guía de Rabat.
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Me viene genial, estaremos a fin de año en Casablanca, e iremos a visitar Rabat, gracias.
Me alegro de que te haya servido esta entrada sobre Rabat. Un saludo y buen viaje Irma!
Perdón, recién veo que hay más información en el sitio!
No hay nada que disculpar. Me alegro que nuestra web te sea de utilidad!
Christian, gracias por la información.
Podrías recomendarme un guía para visitar estos lugares? Voy a estar en Rabat la segunda semana de octubre.
Muchas gracias!
¡Impresionante! Ich würde nie denken, dass Rabat so viele Wundern anbieten könnte! Me ha gustado mucho esta entrada y ha despertado mis ganas de visitar esa parte del mundo. Saludos desde Hamburgo de tus colegas viajeros AmeserosViajeros! 🙂
Me alegro de que te haya gustado esta entrada sobre Rabat. Si te ha despertado las ganas de visitar Marruecos; Marrakech, Fez y Merzouga (Sáhara) sin duda, no deberían faltar en esa escapada!! Sonnige Grüsse nach Hamburg. Slds Christian ,-)