Museo de la Fotografía de Rabat: una mirada abierta al mundo
El Museo de la Fotografía de Rabat es una mirada abierta al mundo, con el único filtro de quien mira por el objetivo de la cámara para captar un momento de la realidad y convertirlo desde ese mismo instante en historia.
Constituido como una oportunidad para mostrar la obra tanto de los fotógrafos marroquíes consagrados y de proyección internacional como de los artistas emergentes, el Museo de la Fotografía ya se ha convertido en un imprescindible para entender los desafíos de la modernidad marroquí.
Un escenario único
Inaugurado el 14 de enero de 2020, lo primero que llama la atención del Museo de la Fotografía de Rabat es el espacio que ocupa, en un edificio cargado de historia. Está situado en el Fuerte Rottembourg, a medio camino entre el faro de Rabat y el antiguo hospital militar, y a 800 metros de la Casbah de los Udayas.
También conocido a lo largo de los años como Fort Hervé o Bork El Kebir, la sede del Museo de la Fotografía es una fortificación de finales del siglo XIX, con una ubicación estratégica para albergar dos cañones de toneladas, regalo del pueblo alemán.
El fuerte lleva el nombre del ingeniero alemán Walter Rottembourg, quien estuvo al frente de los doce años que duraron sus obras, desde 1888 a 1894. Fue el primer edificio de hormigón armado construido en Marruecos y todo un símbolo del poder diplomático antes de que cayera en el olvido.
Primeras muestras
El museo se inauguró con la exposición “Sourtna”, en la que al fotógrafo marroquí Yassine Alaoui Ismaili, colaborador de The New York Times y Everyday África, y conocido como Yoriyas, se le otorgó la responsabilidad de seleccionar a los fotógrafos que conformarían la muestra.
Yoriyas escogió a reconocidos fotógrafos marroquíes de fama internacional, como Kilito M’Hammed o Benzaquen Déborah, en combinación con nuevos talentos, como Murad Fedouache, que a sus 19 años comenzó fotografiando la vida cotidiana desde el puesto de venta de calabazas familiar en Kenitra. El resultado se tradujo en una visión completa y con dinamismo del panorama de la fotografía marroquí, a modo de relevo generacional.
Las fotografías, expuestas en diferentes tamaños y tomadas con una amplia variedad de equipos, desde las más avanzadas cámaras profesionales a teléfonos móviles, fueron capaces de dar una visión completa acerca de Marruecos y su cultura. La muestra se engloba en la intención de hacer del Museo de Fotografía de Rabat un espacio donde los jóvenes puedan expresarse, tal y como expresó el presidente de la Fundación Nacional de Museos, Mehdi Qotbi, el día de su inauguración.
Este espacio expositivo busca democratizar el arte y acercar la fotografía como expresión artística al pueblo marroquí. Una ocasión única para descubrir a los nuevos talentos. Con este museo, además, Rabat confirma su apuesta por la modernidad y su deseo de situarse a la vanguardia del arte del continente africano en un contexto en el que la Fundación Nacional de Museos contempla la apertura de otros espacios expositivos, en el que se incluye la inauguración del Museo de la Música de Meknés.

El punto de vista femenino
El Museo de la Fotografía ha albergado desde su inauguración otras exposiciones, como la que hizo un recorrido por la pandemia del Covid-19 a través de la visión de los fotorreporteros. Desde marzo de 2022, acoge la exposición “Mujeres fotógrafas”, con obras de las más destacadas fotógrafas de Marruecos. Mujeres marroquíes que, cámara en mano, retratan temas como la condición femenina en el contexto sociocultural árabe o el feminismo.
Las imágenes de las 24 fotógrafas escogidas para la muestra, procedentes de diferentes escuelas y con distintos registros, hablan del deseo y la exploración de los secretos de la masculinidad, entre otros ámbitos íntimamente femeninos, como la duda, el miedo o el desconcierto que puede compartir cualquier mujer, independientemente del contexto cultural en el que se mueva.
En esta muestra, en el Museo de la Fotografía se dan cita desde consolidadas y reconocidas fotógrafas, como Lalla Essaydi o Yasmina Alaoui, hasta nuevos talentos que comienzan a emerger en un panorama hasta hace poco reservado al ámbito exclusivamente masculino.
El Museo de Fotografía de Rabat es una mirada abierta al mundo, que plasma todo lo que no logramos ver a simple vista. Un escenario donde los artistas se expresan, exponiéndonos la realidad desnuda ante nuestros ojos y sabedores de que están atesorando un instante detenido en el tiempo, único y exclusivo, para deleite del espectador.