Hamza Zaidi: humor más allá de las fronteras
Hamza Zaidi es creador de contenido… y musulmán. Dos condiciones que, entre otras muchas otras, contribuyen al éxito de su carrera profesional. Nacido en Tetuán, el secreto de su éxito es situar su humor más allá de las fronteras, estableciendo una comparación entre la cultura española y la marroquí que, llevada a la exageración, pone de relieve similitudes y diferencias a la hora de entender la vida.
Hay quien a lo largo de su trayectoria le ha acusado de racista, mientras que otros saben apreciar los tópicos que critica o defiende, según el caso. Pero lo cierto es que lleva años sin dejar indiferente a nadie y cada vez cuenta con más seguidores.
Quién es Hamza Zaidi
Muhammad Hamza Zaidi, conocido en el mundo virtual como Hamza Zaidi, nació en 1997 en Tetuán, pero con año y medio se trasladó junto con su familia a España, por lo que ha crecido entre ambas culturas.
No duda en admitir que era “el graciosillo de la clase”, confirmando que en el colegio se metía en líos, pero destacando que siempre hacía reír a la gente. Esta faceta fue la que, probablemente, le hizo comenzar a generar contenido con solo 16 años en Vine, primero para sus amigos, y después, a raíz del éxito de sus vídeos, para todo aquel que quisiera pasar un buen rato con su humor.
El gran salto le llegó cuando, tras la desaparición de Vine, se mudó a YouTube en 2016, pasando a publicar después contenido en Instagram. A pesar de participar como incipiente actor en series como “El príncipe” o películas como “La ignorancia de la sangre”, nadie -ni siquiera él mismo- podría imaginar que llegaría a las cifras de seguidores que hoy maneja: casi tres millones de seguidores en Instagram, más de 2,3 millones en Tik Tok y más de 1,3 millones en YouTube.
Reírse de sí mismo
Millones de seguidores disfrutan de su contenido a diario en redes sociales. ¿El secreto de su éxito? Poner encima de la mesa los estereotipos de la cultura marroquí y española con un sencillo fin: pasar un rato divertido. Una fórmula de éxito que le ha llevado a colaborar con grandes youtubers como Wismichu o AuronPlay, y que le ha permitido ser la imagen de marcas como Sprinter, Sprite o Bimbo a lo largo de su trayectoria.
Zaidi se hizo famoso por su grito de guerra: “Ki ti pasa”, la versión del “¿qué te pasa?” español, pero con acento marroquí. También han sido ampliamente celebradas sus parodias en las redes sociales con personajes estereotipados, como Fatema, la mujer musulmana coleccionista de velos y practicante de la lucha libre con chancla, o Abudulá, un marroquí propietario de varios Lamborghinis y un harén de mujeres, con los que ha hecho reír a millones de seguidores.
Practicante del Islam, como su familia, Zaidi se define como un musulmán de corazón que nunca ha renegado de su cultura. Su objetivo siempre ha sido demostrar que el humor se puede dar más allá de las fronteras, ironizando en muchos casos sobre las diferencias entre Marruecos y España. “Creo que saber reírse de sí mismo y de las tradiciones propias es bueno. Conozco las costumbres españolas y marroquíes, y en mis videos las exagero. Pese a lo que pueda parecer tengo muchos seguidores marroquíes, porque mi estilo sirve para ampliar los límites del humor”, señala.
Contenido viral
Para muchos, el estilo del influencer recuerda al de otros grandes youtubers de éxito internacional, como Anwar Jibawi, de ascendencia musulmana, Rudy Macuso, latino, o el africano King Bach, que han sabido ironizar sobre las culturas de las cuales proceden y abrirlas al humor.
En el caso de Zaidi, son famosas sus parodias de canciones célebres, como las que hacen referencia del éxito de Maluma “Cuatro babys”, reconvertido en “Cuatro kebabs”. O “Tobillitos”, basadas en la canción “Despacito” de Luis Fonsi, donde se puede escuchar la siguiente letra: “Deja que te diga cosas al tobillo, para que me recuerde que está tapadito…”.
En este sentido, el influencer ha señalado que “a veces, exagerando tanto, puede que alguien se sienta ofendido, pero yo no quiero ofender a nadie”. A pesar de ello, el youtuber ha manifestado que, al principio de su carrera, mantenía bloqueada a su madre en Instagram para que no viera su contenido porque le daba vergüenza.
Hoy Zaidi aprovecha también el éxito de sus plataformas para mostrar al mundo las tradiciones del Islam. Uno de los vídeos que despertó más interés fue el que repasaba las costumbres de su familia en el Ramadán, que sirvió para acercar a muchos jóvenes a la cultura del Islam.
Un momento serio en su carrera
Si ha habido un momento serio en su carrera fue cuando ocurrieron los atentados de Barcelona y Cambrils. De la noche a la mañana se despertó con sus redes llenas de mensajes hirientes y comentarios islamófobos. Ese día, a las 9 de la mañana, y sin pensárselo dos veces, lamentó las víctimas y dio el pésame a sus familias, para resaltar la pena que le producía que asociaran a cualquier musulmán con los atentados. “Los que han hecho estos no representan al Islam. En el Corán dice claramente que no puedes hacer daño a nadie. En todos los sitios hay gente buena y mala”, señalaba lleno de frustración.
Y dentro de esta vertiente seria, y la conciencia de la gran oportunidad de acercar la cultura marroquí a la gente joven y concienciar de los peligros de las redes sociales, como creador de contenido ha dado charlas en institutos madrileños sobre el uso responsable de Internet.
Una labor social que ha compaginado con todas aquellas otras facetas a las que le ha empujado su mente inquieta, que le ha hecho poseer su propia tienda y marca de ropa, o impulsar su faceta musical, actuando como DJ o como cantante. Así, Zaidi pasó de grabar canciones humorísticas como “Marruecos Shore”, “La chancla de Fatema” o “El kibab con carne de rata” a, junto con Omar Montes, colocar la canción “Yalah Yalah” en el decimocuarto puesto de la lista de Tendencias de Spotify en solo un día, alcanzando las 300.000 reproducciones en menos de 24 horas.
Dicen los entendidos que el ímpetu y el descaro propio de la juventud de este joven ha derivado en un contenido más blanco y una carrera profesional más seria. Recientemente se la ha podido ver organizando y presentado una de las veladas de boxeo más comerciales de España, aunque su objetivo de seguir haciendo reír exagerando los tópicos de cada país permanece, sin embargo, intacto. Un contenido que coloca al humor más allá de las fronteras, aunque son muchos los que también ven en cada parodia un intento de hacer reflexionar sobre lo que realmente esconde.